En el inicio del primer mes de 2023, la Secretaría de Relaciones Exteriores desplegó una intensa actividad con la Cumbre de Líderes de América del Norte y la Reunión de Embajadores y Cónsules (REC) 2023. En esta última, quienes conformamos las diferentes áreas de la Cancillería mexicana tuvimos la oportunidad de comunicar los logros del 2022 y especificar los trabajos que llevaremos a cabo en este nuevo año, a fin de coordinar esfuerzos con nuestras representaciones de México en el exterior.SKIP AD
Y aunque ya ha pasado un mes de la REC 2023, me parece importante resaltar que logramos retomar el diálogo que hemos tenido en años anteriores con las y los embajadores de México, así como con las personas cónsules, para abordar varios temas de importancia estratégica para la política exterior multilateral transformadora, es decir, trabajar en lo relativo al cambio climático, biodiversidad, gestión diplomática de vacunas, océanos, derechos humanos y política exterior feminista, entre otros.
Con el trabajo de 2022 logramos asumir compromisos importantes que abonarán al futuro del desarrollo social y económico de nuestro país. El año pasado nos dejó importantes enseñanzas tanto en la esfera nacional como en la internacional, las cuales debemos abordar para afianzar el papel del multilateralismo. Ejemplo de ello fueron las consecuencias derivadas de la pandemia de COVID-19 y las situaciones generadas por la invasión de la Federación Rusia a Ucrania tras casi un año que se desató el conflicto, sumando así nuevos desafíos que cuestionan la efectividad del multilateralismo ante las crisis energéticas, alimentarias, ambientales y económicas.
Por ello, nuestra visión de trabajo se enfoca en la proactividad y el seguimiento a lo ya hecho para garantizar la implementación en torno a los temas de la agenda del ámbito multilateral como son los derechos humanos, electromovilidad, promoción y atracción de inversiones, seguridad y paz internacionales, género, medio ambiente, organismos internacionales, vinculación con la sociedad civil y conservación de los mares y océanos, entre otros.
En cuanto a la agenda urbana, este año concluye la presidencia de México en la Asamblea General de ONU-Habitat, que encabecé en el periodo 2019-2023, por lo que durante la segunda edición retomaremos todas las acciones que promovimos, al igual que el trabajo particular de nuestro país en torno a la Nueva Agenda Urbana, como el proyecto “Interconectando Ciudades Inteligentes” y las consultas ciudadanas que efectuamos en varios estados de México para integrar las opiniones de mexicanas y mexicanos en el posicionamiento del 11° Foro Urbano Mundial.
En materia de derechos humanos, este año estaremos participando en diversos órganos internacionales de carácter multilateral como el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas en sus periodos 52, 53 y 54 de sesiones, así como en el 67 periodo de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, solo por mencionar algunos. También seguiremos impulsando nuestra Política Exterior Feminista en estos y en otros foros donde se necesite alzar la voz por la equidad de género.
Con motivo del 75 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, buscaremos reforzar nuestra posición ante los organismos internacionales de carácter multilateral, sobre el respeto irrestricto de los derechos humanos de todas las personas, así como la atención a grupos en situación de vulnerabilidad.
Para continuar con las acciones de impulso económico de nuestro país, seguiremos proyectando en el mundo nuestros trabajos relativos al Mecanismo de Facilitación para la Inversión y Promoción en el Exterior. México necesita acelerar la recuperación económica tras los años de pandemia y esta labor será fundamental para ello. Además, en el tema de electromovilidad, iniciamos el año con la presentación del Diagnóstico y Recomendaciones para la Transición de la Industria Automotriz en colaboración con la Universidad de California.
Finalmente, y sin restarle importancia, el trabajo de esta subsecretaría en torno al cuidado y protección del medio ambiente y de los océanos seguirá siendo clave en nuestra agenda, dado que estaremos concentrando múltiples esfuerzos en las acciones de implementación del Tratado Kunming-Montreal, del Acuerdo de Escazú y de la agenda oceánica, para acercarnos gradualmente al cumplimiento de la Agenda 2030 y sentar las bases para vivir en armonía con la naturaleza hacia 2050.
Sin duda, nos espera otro año muy activo y con metas por cumplir, para continuar con el liderazgo de México ante los diferentes órganos multilaterales internacionales, sin dejar a nadie atrás.
*La autora es subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE.
